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Valle Real recibe el certificado Breeam

Este certificado avala el compromiso con la sostenibilidad del centro comercial cántabro, propiedad de Sonae Sierra.

Valle Real recibe el certificado Breeam

El centro comercial Valle Real, en Camargo (Cantabria), cuenta ya con el certificado Breeam en uso, un sello de reconocimiento internacional en el ámbito de la edificabilidad.

Este certificado avala el óptimo rendimiento del complejo y los bajos niveles de emisiones ambientales del mismo. Reconoce, además, las medidas que implementa el centro para preservar la salud y garantizar el bienestar de los usuarios de los edificios. Por otra parte, contribuye a aumentar el valor financiero de los activos en beneficio de sus clientes e inversores.

Hay que destacar que el certificado Breeam se divide en dos calificaciones, una referente al edificio, en la cual Valle Real ha obtenido un resultado de "muy bueno", y una segunda calificación que hace referencia a la gestión del inmueble en la que ha obtenido una valoración de "excelente.

"No cesamos en nuestro empeño por ofrecer a nuestros clientes un centro renovado y sostenible que mejore su experiencia. Este certificado avala este firme compromiso con la sostenibilidad y reconoce el respeto del centro al medioambiente y su integración en el entorno en el que se ubica", ha declarado Marien Garmendia, directora de Valle Real.

Sonae Sierra, su propietaria, lleva a cabo en todos sus centros comerciales numerosas prácticas destinadas a la obtención de este certificado. Así, algunas de las principales iniciativas que promueve la compañía son:

  • La contratación de energía verde, procedente de fuentes renovables, demostrando su compromiso por minimizar el impacto medioambiental de su actividad.
  • Creación de áreas verdes y mejora de su valor ecológico.
  • Buena accesibilidad en transporte público y disposición de espacios para aparcar bicicletas, así como otros servicios adicionales.
  • Buena accesibilidad para personas con discapacidades.
  • Utilización de equipos de bajo consumo de agua.
  • Uso de contadores auxiliares que monitorizan los principales consumos energéticos.
  • Cumplimiento de la gestión de residuos gracias a un buen proceso de separación de desechos en todos los centros comerciales.