El establecimiento, de aproximadamente 200 metros cuadrados, que releva a Kiehl’s, se encuentra en el número 52 de la céntrica calle madrileña, junto a Uterqüe. La operación ha sido intermediada por las consultoras Ascana y Cushman & Wakefield.
Las gafas graduadas de la firma, que también cuenta con una oferta de sol y accesorios, tienen un precio mínimo de 98 euros, que asciende según los complementos que se incluyan.
Las tiendas ofrecen servicios como probar una colección completa, hacer un examen ocular gratuito y recibir un asesoramiento estilístico personal. Otra opción es elegir cuatro monturas, probarlas durante cinco días y luego decidirse por una. La compañía se encarga de los gastos de envío.
La empresa cuenta con una red de sesenta tiendas. La mayoría se concentran en Holanda, Bélgica, Alemania y Reino Unido, aunque también está presente con uno o dos establecimientos en Dinamarca, Suecia, Austria e Irlanda.