Su implementación quiere ser una oportunidad para crear "una experiencia cliente poderosa y creativa que transmita confianza y seguridad sin perder el sentido del humor y del diseño, al tiempo que se refuerzan los valores del branding del centro comercial.
Como referencia, se utilizan las guías de Buenas Prácticas publicadas por el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo de España, y manuales o medidas implementadas en Alemania, Taiwan, China y Singapur.
Para una fácil comprensión, las medidas se han reagrupado en cinco zonas características de los centros comerciales. En lo que respecta al mall en general, antes de entrar se recomienda el uso de mascarillas por parte de los clientes. Se recomienda hacer una limpieza general antes de la apertura y varias a lo largo de la jornada, poniendo especial atención en las zonas de contacto. Se deben incluir marcas en el suelo, que señalen la distancia de seguridad de dos metros, instalar dispensadores sanitarios y delimitar los sentidos en las escaleras. Se deberán cerrar o limitar el uso de las zonas estanciales.
Dentro de los locales también se deberán gestionar las colas y controlar los aforos. Se puede recomendar poner mamparas en las cajas, dispensar guantes y geles desinfectantes.
En los food courts las zonas infantiles estarán cerradas, el aforo de las terrazas se limitará al 50 % y habrá una zona específica para el servicio de recogida.
Los aseos también tendrán limitaciones de acceso, anulando los elementos que impidan mantener la distancia de seguridad e informando de todas las medidas higiénicas sanitarias.
En el parking también se instalarán dispensadores sanitarios y se habilitarán zonas específicas para el servicio de recogida. En las escaleras mecánicas, se debe señalar la distancia de seguridad cada cuatro escalones y ubicar dispensadores de gel tanto en el arranque como en la llegada.