Dentro de su compromiso por llevar a cabo su actividad de forma sostenible, la compañía comenzó en 2011 su estrategia para reducir el consumo de bolsas de plástico, adelantándose a la última normativa que entró en vigor en 2018 de cobro de las mismas, con lo que consiguió reducir su consumo un 80%. Posteriormente, en 2015 las sustituyó por bolsas de plástico 100% reciclado.
Como alternativa para aquellos clientes que lo deseen y no lleven consigo su propia bolsa cuando acudan a una tienda Decathlon, la compañía pone a su disposición por 1 euro bolsas confeccionadas a partir de los excedentes textiles de la producción de sus artículos.
Además, Decathlon destinará íntegramente el dinero procedente de las bolsas de retales a su campaña anual de voluntariado ambiental que lleva a cabo desde 2014.
Dentro de su compromiso medioambiental, el pasado mes de abril firmó un acuerdo con WWF España para aunar fuerzas en la protección de la naturaleza. Dentro del marco de este convenio, uno de los ejes de trabajo es la campaña Naturaleza sin Plásticos, donde WWF y Decathlon juntan esfuerzos para racionalizar el uso de plástico.