Tras estar cerrado más del 50% de los días hábiles en este período, los centros comerciales se reafirman como garantía de máxima seguridad en el contexto de la pandemia. Consideran que esta situación produce un agravio comparativo ya que se les ha obligado a cerrar dos meses más que las grandes superficies y tres meses más que el resto de comercio. El impacto económico para los centros comerciales de Cataluña pone en riesgo más de 15.000 puestos de trabajo.
El gerente de Espai Gironès, Pau Jordà, y el gerente de Gran Jonquera Outlet & Shopping, Nacho Bonet, han manifestado, en una rueda de prensa conjunta en Espai Gironès, su gran preocupación, malestar e indignación por las decisiones adoptadas por el Gobierno de Cataluña que consideran discriminatorias. “No hay ningún caso comparable en España ni en Europa", han explicado. Espai Gironès y Gran Jonquera Outlet & Shoppig representa más de 200 comerciantes, 1.400 puestos de trabajo directos y más de 5.000 puestos de trabajo indirectos. En total, más de 7.000 familias. Desde el último cierre del 7 de enero no han podido volver a abrir las puertas.
Señalan que el 85% de los establecimientos de los centros comerciales catalanes son tiendas y franquicias pequeñas y que el daño económico que está generando es muy grande, tanto para los comerciantes, como para los trabajadores y para las empresas que dependen de los centros: empresas proveedoras, pequeños fabricantes, transportistas, empresas de limpieza, de seguridad, de mantenimiento... "El Gobierno nos había asegurado, durante los contactos que hemos mantenido las últimas semanas, que podríamos abrir el 22 de febrero y el viernes por la mañana, se cambia de criterio y la consejera de Salud (que precisamente estaba en Salt de visita) no dio ninguna explicación. Pensamos que sólo como ciudadanos que pagamos nuestros impuestos tenemos derecho a que se nos informe ", han destacado los gerentes de los dos centros.
Para evitar agravar aún más la situación desde el sector se pide a la Generalitat la inmediata reapertura, ya que desde el comienzo se ha demostrado que los centros comerciales son espacios seguros y se está haciendo un esfuerzo económico enorme para implementar en todo momento las medidas de seguridad y sanitarias para poder llevar a cabo una compra segura y sin ningún riesgo.
"El Gobierno de la Generalitat no tiene ninguna prueba que demuestre que para mantener los centros comerciales cerrados la situación epidemiológica mejora o empeora, ya que los datos van fluctuando y queda claro que no se deben a los centros comerciales, ya que han sido cerrados todo este tiempo, en todo caso se deben a una mala gestión por parte del Gobierno”, han indicado.
"Hemos demostrado ampliamente que somos espacios seguros y que la incidencia del comercio es ínfima en la transmisión de la pandemia, sobre todo cuando con datos de Salud se demuestra que el porcentaje más importante de transmisión se da en los hogares con encuentros privados. Además, los comercios que están en los centros comerciales deben seguir unos protocolos muy estrictos y han cumplido escrupulosamente con todas las medidas establecidas: aforo, mascarillas, gel, señalización, ventilación, limpiezas extraordinarias, protocolos estrictos de actuación...”, han añadido.
Los gerentes de Espai Gironès y Gran Jonquera Outlet & Shopping también han recordado que “durante los pocos días que se ha podido abrir los centros nadie se ha molestado en venir a comprobar si se cumplían las medidas de seguridad y esto es otra muestra de la pésima gestión desde la Generalitat. Lo que haría falta es una colaboración pública-privada y apoyo mutuo para hacer frente a la situación y encontrar las mejores soluciones posibles”.
Finalmente, los gerentes han destacado que la relación con los comerciantes de los dos centros es más fluida y transparente que nunca. “En esta crisis entramos juntos con los comerciantes y saldremos juntos también. Trataremos de tomar todas las medidas que haga falta dentro de las posibilidades de cada uno”, han manifestado.