Así, de haberse producido esta reformulación de concepto, Urban PLanet estima que los malls españoles podrían haber cerrado el pasado año con un crecimiento del número de visitantes del 5%, muy por encima del 3,1% registrado el pasado año, casi dos puntos porcentuales más, según datos de la Asociación Española de Centros Comerciales (AECC), lo que se hubiera traducido en alrededor de 2.000 millones de visitas en un solo año.
Según la compañía, la renovación que están acometiendo los centros comerciales en nuestro país apostando por nuevos formatos de ocio, gastronomía y convivencia ya permitió que el año pasado el tráfico de visitantes recuperara la senda alcista tras un descenso del 1,5% en 2017, lo que traccionó también las ventas que aumentaron un 2,9% haciendo frente así a la imparable tendencia del comercio electrónico y la concentración urbana.
El año 2018 ha marcado un punto de inflexión para el sector de los centros comerciales que cada vez son más conscientes de la necesidad de una transformación del modelo tradicional de compras, un formato que empieza a mostrar claras deficiencias y que comienza a virar hacia un modelo más afín al consumidor y centrado en la experiencia.
Actualmente, son el 3,5% del total del sector en España lo conforman centros especializados en ocio, restauración y tiempo libre a pesar de que 2018 fue testigo de una mayor tendencia hacia la reformulación de los espacios comerciales de acuerdo a estas premisas. Este cambio de concepto afecta también a la dinamización de las zonas comunes y de tránsito, con el fin de acercarse más hacia la idea de espacios experienciales y no únicamente de compras, con gran capacidad de atracción de perfiles de público muy diversos.