Son muchos los comercios y los supermercados que ya están incorporando sistemas de autoescaneo como el ‘Scan & Go’, que permite a los consumidores escanear el código de barras de los productos a través de sus smartphones sin necesidad de mantener contacto físico durante el proceso. Scandit, especialista en visión artificial móvil y realidad aumentada (AR), destaca la necesidad de incorporar tecnologías de escaneo móvil en el sector retail para cambiar la forma en que las empresas y los consumidores interactúan con los objetos cotidianos.
Los sistemas de autoescaneo están siendo bien acogidos por los clientes. De hecho, el 66 % de los consumidores prefiere escanear sus productos en el supermercado y un 67 % cree que utilizar esta tecnología móvil supone un ahorro de tiempo para los empleados y los proveedores, según datos de la última encuesta realizada por SOTI.
Los escáneres tradicionales suponen un riesgo higiénico para los clientes y un esfuerzo añadido para los empleados, que tienen que mantener la limpieza adecuada entre usos. Este nuevo concepto de compra rápida permite a los comercios cumplir con las reglas de
distanciamiento social de una manera instantánea.
Muchos supermercados ya están incorporando esta tecnología y está previsto que el mercado del autoservicio supere los 4.000 millones de dólares en 2024, según Global Market Insights. “Desde la crisis del coronavirus, algunos de nuestros clientes están viendo cómo se duplica el número de transacciones en las tiendas gracias a los servicios de autoescaneo que funcionan a través de los teléfonos móviles de los propios clientes”, asegura Samuel Mueller, CEO de Scandit.
Globus, una de las empresas comerciales líderes en Alemania, multiplicó por seis el número de clientes que descargaron la aplicación de autoescaneo en solo cinco meses.
Por otro lado, esta tecnología es una importante fuente de datos sobre el comportamiento de los clientes. El análisis del uso de las aplicaciones es un método eficaz para evaluar el rendimiento en las tiendas, los tiempos de espera en las cajas, los patrones de compra, el tamaño de las cestas y la satisfacción de los clientes, entre otras cuestiones.
“Para poder competir con las compras online, los comercios tienen que acelerar su proceso de transformación digital y satisfacer las nuevas demandas sociales. Ahora más que nunca, es necesario eliminar las barreras entre el mundo online y offline”, afirma Samuel Mueller.