Por ello, con el objeto de facilitar la continuidad económica y contribuir a la viabilidad de los negocios de los retailers, el centro bonificará la renta de todos aquellos operadores que por imperativo legal se hayan visto obligados a cerrar sus establecimientos y no hayan podido hacer uso de los mismos desde el inicio del estado de alarma y mientras esta situación de cierre perdure.
Estepark seguirá muy atentamente monitorizando la evolución y el impacto del COVID-19 durante las próximas semanas con el objetivo de seguir dando una respuesta responsable y adaptada a la situación. El centro comercial y de ocio confía en que "esta crisis sanitaria se solucione lo antes posible y pueda retomar su actividad en la mayor brevedad".