La compañía se enorgulleció de sus resultados debido a la “feroz” competencia del sector en España y “a pesar de una difícil situación macroeconómica y ambiente político”.
Según la firma, sus operaciones en España han mostrado una "fuerte" resistencia en un contexto de consumo "debilitado y de competencia feroz", mientras que Portugal ha continuado su crecimiento "sostenido", impulsado por las ventas en telefonía, tecnología y servicios.
Asimismo, los gastos operativos de la firma en la península ibérica se han aumentado ligeramente, un hecho que la compañía atribuye a la campaña de expansión continua con la que cuenta en esta zona. Han abierto ochos nuevos centros en 2019.
Respecto al total de sus resultados, el grupo francés contabilizó un beneficio neto atribuido de 105 millones de euros en 2019, lo que equivale a un descenso del 30 % en comparación con el año anterior. Achacó esta reducción de los beneficios a los costes financieros y a los disturbios registrados en Francia el pasado año, que recortaron de manera relevante la actividad.
Por otro lado, los ingresos de la multinacional se incrementaron un 3 %, hasta situarse en 7.349 millones de euros. Por áreas geográficas, las ventas en Francia y Suiza aumentaron el 3,4 %, hasta 6.031 millones de euros. En Bélgica y Luxemburgo la cifra de negocio se elevó el 0,3 %, hasta 596 millones de euros. Lo que deja el resultado obtenido en la península ibérica (722 millones) en segunda posición.
Según el CEO de la compañía, Enrique Martínez, para 2020 FNAC Darty se fija como objetivo un “ligero crecimiento del volumen de ventas y del resultado operativo corriente” en el 2020, así como lograr a medio plazo un crecimiento del volumen de ventas superior al de sus mercados y un margen operativo corriente del 4,5 % al 5 %.
Además, comunicó la intención de la firma de lanzar este año una política de retorno a los accionistas y, en la próxima junta general, propondrá el pago de un dividendo de 1,50 euros por acción.