Gemma Beauty Bar nació en 2016 con el propósito de convertir en realidad cualquier deseo que la mujer tuviera para sus manos, ojos y mirada. Ahora, apuesta por su expansión a través del sistema de franquicia para conquistar el resto del territorio nacional.
Al frente de este negocio se encuentra Gemma Pilar Alpuente, profesional experta con amplia experiencia al frente de sus centros de estética. La marca ha conseguido hacerse un hueco entre las firmas de la estética en la ciudad zaragozana.
Además, la marca imparte formaciones a nivel nacional Madrid, Barcelona, Bilbao, Tenerife a través de Gemma Beauty Academy. La academia cuenta con más de 1.000 alumnas formadas, bolsa de trabajo y un programa completo de apoyo y seguimiento personalizado.
Emprender
La enseña busca emprendedoras que quieran ponerse al frente de algo más que un centro de estética y deseen liderar su propia empresa de servicios de belleza y cuidado personal de la mano de una marca consolidada. Entre los perfiles ideales, además de inversores, destaca el de esteticistas que deseen relanzar su carrera profesional y abrir su negocio.
“Nuestro modelo de franquicia ofrece diferentes formatos de negocio en función de lo que quiera el franquiciado. Desde un córner en un negocio ya en funcionamiento hasta un local que permite ampliar los servicios disponibles. De esta manera, facilitamos la inversión de puesta en marcha que deben realizar nuestros franquiciados”, explican desde la compañía.
La franquicia se presenta como un modelo 100% escalable que se adapta tanto a los intereses de las emprendedoras que deseen ocupar una posición como responsable de uno o más centros de estética integral, como a aquellas personas que prefieren vincularse, exclusivamente, a la ejecución de servicios de belleza personal.