Mientras, del lado vendedor, se abre la posibilidad de liberar y capitalizar el valor de los activos inmobiliarios con contratos de arrendamiento a largo plazo; reforzando sus balances y reduciendo deuda en inmobiliario para invertir en mejorar la experiencia del cliente en sus tiendas y consolidar los planes de expansión, aprovechando menor competencia de otros operadores de retail.
Por otro lado, los parques de medianas también tendrán una nueva vida en el mercado inversor visto lo que ocurre ya en EE.UU. En los negocios ubicados en estos parques con fórmulas como el “curbside pick up” o “click & collect” ya están notando incrementos en las visitas y en las ventas, lo cual supone para el consumidor una manera rápida y segura de hacer sus compras, ya que son espacios más amplios y con parking gratuito en superficie.
“En pleno estado de alarma se han cerrado varias operaciones de inversión y avanzado en otras tantas; hemos constatado que no se han cancelado aperturas de tiendas nuevas y; algunos operadores han aprovechado para seguir analizando posibles localizaciones, no solo manteniendo sus planes de expansión, sino revisándolos al alza y acelerándolos en su ejecución”, afirma Rafael Paz, director de la oficina de Valencia de Colliers y responsable de la reciente transacción sobre la cadena de hipermercados Family Cash.
Los datos del sector son buenos. Las ventas de supermercados y otras superficies de alimentación más pequeñas se habían disparado hasta en un 71 % más, durante las primeras semanas de confinamiento para luego estabilizarse entre un 12 % y 15 %. Así que un sector está saliendo mejor parado y algo reforzado de esta crisis; por un lado, derivado de su condición de actividad esencial y, por otro, del modelo de gestión por parte de sus operadores: la distribución de productos de alimentación.