Lo ha hecho bajo la iniciativa del proyecto Origen y de la mano de la Asociación Ilicitana de Trastorno del Espectro Autista y del Lenguaje (AITEAL). En concreto, se trata de una acción solidaria para que los adultos y niños con la condición de autismo puedan disfrutar de paseos y compras en el centro comercial sin sentir miedo o ponerse nerviosos.
Una actividad tan habitual para todos como es ir a comprar, puede suponer un gran esfuerzo para las personas con autismo. Un entorno lleno de estímulos sensoriales, luces brillantes, olores diferentes, sonidos y movimientos inesperados son aspectos que pueden resultar difíciles de manejar para este colectivo.
“La hora del silencio” se llevará a cabo todos los lunes de 10.00 a 11.00 horas. Durante esos 60 minutos los comercios y trabajadores, así como el centro, se comprometen, en la medida de lo posible, a lograr que estas personas tengan una estancia agradable. Se fomentará el silencio, no habrá música ambiente durante esa hora, ni sonido en la mega pantalla. Además, se disminuirá levemente la luz en el centro comercial y en los locales adheridos a esta iniciativa. De igual modo, se procurará que el tono de voz durante esa hora, sea más calmado de lo habitual entre los trabajadores. Por otro lado, se incluirá en los aseos una señalización especial para las personas con la condición de autismo.
“El convenio de colaboración con la asociación AITEAL ha supuesto un paso adelante en nuestra intención de acercar el centro comercial a toda la población y hacerlo más accesible. Con estas nuevas medidas nuestra intención es que las personas con autismo puedan disfrutar de paseos y compras en el centro comercial sin sentir miedo o nervios”, ha señalado Germán López, director del centro comercial.