Así, entre el 25 de mayo y el 7 de junio, la Gran Vía de Bilbao recibió un 57 % más de visitantes que las dos semanas anteriores, todavía en Fase 1, y con menos flexibilidad de movilidad para los ciudadanos y de actividad para los retailers. En la semana del 8 de junio, cuando Bilbao entró en Fase 3, la afluencia semanal a la Gran Vía aumentó, aunque más moderadamente, un 17 %.
Pese a esta recuperación paulatina en las afluencias, y de forma lógica, la cifra está todavía en torno a un 50% por debajo de las cifras semanales medias que se registraban antes de la pandemia.
“El high street de Bilbao se nutre de forma regular del millón de habitantes que reside en su área metropolitana. A pesar del claro ascenso de la afluencia de visitas a la capital al comienzo de la Fase 2, muchos de los habituales consumidores del centro aún no se han desplazado a la ciudad. Esto se debe, entre otras cosas, a que el establecimiento generalizado del teletrabajo los mantiene en sus poblaciones de residencia. La vuelta a las oficinas prevista para las próximas semanas supondrá una importante inyección de afluencia y reavivará sin duda el entramado comercial bilbaíno”, afirma Juan José López del Corral, director regional de CBRE Bilbao.
“Nuestra ciudad, que basa una parte importante de su atractivo y su vida social en la oferta gastronómica, avanzará también con paso acelerado hacia la normalidad con la apertura de sus locales de restauración”, añade López del Corral.
Este estudio ha sido posible gracias a Calibrate, la herramienta desarrollada por CBRE, que permite conocer los hábitos de los visitantes de una zona, aportando información demográfica sobre estos.
“En un momento de cambio y disrupción tecnológica, esta herramienta resulta clave en el asesoramiento a retailers, aportando datos para tomar decisiones estratégicas, que les permitan cubrir las necesidades de sus consumidores y acercarse a ellos”, indica López del Corral.