“La crisis de COVID-19 nos sitúa ante el escenario más desafiante para la industria en las casi tres décadas de historia de nuestra compañía. Tras un fuerte comienzo de año con un crecimiento de las ventas en los restaurants de alrededor del 5 % tanto en enero como en febrero, el confinamiento obligatorio en marzo tuvo un impacto significativo en el negocio", señala, Mark Chandler, CEO de AmRest. "
"Hemos reaccionado rápido y con fuertes medidas para garantizar tanto la salud y la seguridad de empleados y clientes; el crecimiento de las ventas a través de los canales disponibles y para asegurar la liquidez con el objetivo de mitigar el impacto financiero. Las iniciativas para aumentar las ventas a domicilio han dado sus frutos y han podido compensar una parte cada vez mayor de las pérdidas por la falta de negocio en los restaurantes (dine-in). No obstante, el hecho de tener hasta el 58 % de nuestros restaurantes cerrados en marzo ha supuesto en términos generales un significativo impacto en la rentabilidad”, añade.
El Grupo obtuvo un EBITDA de 42,6 millones de acuerdo con la NIIF16. El impacto negativo del apalancamiento operativo debido a la caída de las ventas, con una mayor cuota del servicio a domicilio y las promociones, ha afectado principalmente a la rentabilidad. Los ingresos en Europa Central y del Este en 1T20 alcanzaron los 181,8 millones de euros, lo que supuso una disminución interanual del 2,1%.
Este hecho se debe principalmente al fuerte desempeño durante la segunda mitad de 2019 y a las tendencias de crecimiento en enero y febrero. Sin embargo, esto se ha visto contrarrestado por la limitada actividad comercial en marzo, con el servicio a domicilio, la recogida y la entrega sólo disponibles bajo las restricciones aplicadas. El negocio en Rusia ha registrado un importante crecimiento interanual del 11,8 % en el primer trimestre, hasta alcanzar los 49,1 millones de euros, gracias a la solidez de la actividad y el desempeño, compensado en parte por las restricciones aplicadas en la segunda mitad de marzo.
Las ventas en Europa occidental alcanzaron los 164,9 millones de euros en este período, lo que supone un descenso del 13,5 % con respecto al ejercicio anterior, impulsado por el bloqueo de las economías, que incluye el cierre de restaurantes y centros comerciales y el cierre forzoso temporal de la mayoría de los restaurantes de Francia y España en marzo, así como una participación relativamente mayor en el negocio de las comidas en el local.
La actividad en China ha registrado una caída interanual del 49,7 % en las ventas, hasta los 9,9 millones, como resultado de las primeras medidas de confinamiento para limitar la propagación del coronavirus implementadas en la segunda mitad de enero, así como la alta cuota del modelo de comidas en el local.
En cuanto a la rentabilidad, los márgenes de todas las áreas de negocio se vieron afectados principalmente por el efecto negativo del apalancamiento operacional, debido a la disminución de las ventas junto a una mayor proporción del servicio a domicilio y promociones. El margen EBITDA del negocio de Europa Central y del Este ha disminuido hasta el 15,8 %. El negocio en Rusia ha alcanzado un margen EBITDA del 15,3 %. Europa Occidental ha registrado un margen EBITDA del 6,7 % frente al 15,3 % del año pasado, impactado adicionalmente por una mayor cuota del segmento de casual dining.
China ha registrado la mayor caída en la rentabilidad ya que el margen de EBITDA se ha reducido al (2,4 %) desde el 23,8 % del año pasado debido al impacto de un mayor período de restricciones durante los resultados del primer trimestre, así como a un negocio más orientado a la comida en el local.