PALM M-40 se ha desarrollado en dos fases, en la primera, ya disponible, ofrece superficies desde los 3.500 metros cuadrados hasta los 51.823. La segunda fase con una superficie de 47.152metros cuadrados está disponible para atender demandas de proyectos llaves en mano.
El parque logístico se ha dotado de la infraestructura necesaria para atender a una amplia red de vehículos eléctricos, lo que le ha permitido alcanzar la certificación de eficiencia energética LEED Gold.
El cierre final de esta operación en tiempos de COVID-19 confirma la resiliencia del mercado inmobiliario del sector logístico. Las claves de este crecimiento se sustentan en un ascenso de la demanda de espacio logístico en alquiler, gracias al incremento del consumo online, la profesionalización del sector, las buenas perspectivas que presenta y unas rentabilidades atractivas que ofrece, en el entorno del 5%, comparado con otros sectores tradicionales como oficinas y retail calle (3,25% - 4%).
Para el cierre de 2020 se prevé que la contratación se sitúe en el entorno de los 700.000 metros cuadrados en el centro de la península, lo que situará al presente ejercicio como el tercer mejor registro de la serie histórica, solo por detrás de 2017 y 2018. El volumen de inversión registrado hasta la fecha se sitúa en 740 millones de euros, lo que nos permitirá prever que se cerrará el año con una cifra cercana a los 1.000 millones de euros.
“No tenemos duda de que PALM M-40 será un referente en la logística de la ciudad de Madrid que contribuirá a la consolidación y transformación del stock actual en espacio logístico de alta calidad en el entorno de Madrid. Esto sin duda ayudará a preparar la ciudad ante el ya evidente crecimiento del comercio electrónico, como hemos visto evidenciar en momentos de COVID-19”, afirma Fernando Sauras, director nacional de inversión industrial y logística en BNP Paribas Real Estate.