Los establecimientos, situados en el centro comercial Xanadú y en la Avenida de La Institución Libre de Enseñanza, suponen la creación de alrededor de 50 puestos de trabajo que se suman a los cerca de 500 que la marca ya genera en la comunidad.
Con estos nuevos restaurantes, Popeyes continúa con su apuesta por la región, que se inició hace apenas dos años, con la apertura del primer local de la marca en España. De esta forma, Madrid se sitúa como la comunidad con más restaurantes de la marca (15 establecimientos).
En este sentido, ha enseña ha registrado una inversión total de aproximadamente 12,5 millones de euros. La compañía pretende realizar 25 aperturas este año y alcanzar los 40 restaurantes en España a finales de 2021.
“Seguimos trabajando en la expansión de la marca y continuamos con nuestro plan de crecimiento para este 2021 con mucha ilusión. Madrid es un territorio clave para nosotros y muestra de ello es nuestra apuesta por la región. Hoy alcanzamos los 15 restaurantes en la comunidad y esto es gracias a la estrategia que estamos llevando a cabo. Con estos resultados, estamos más animados que nunca a lograr los mismos objetivos en el resto de las comunidades”, ha explicado Ignacio Sedano, general manager de Popeyes en España y Portugal.