La marca, que inspira sus creaciones en la naturaleza, ofrece propuestas que combinan el diseño y su patente exclusiva de baño de oro blindado de 18 quilates.
El concepto de las tiendas, que se ha aplicado también en Porto Pi, se basa en la organoléptica, a través del cual la estancia en la tienda busca ser una experiencia para los sentidos y cada detalle se cuida al máximo.