Esto se ha logrado, a pesar de que el mercado históricamente más grande, Reino Unido, se vio frenado (-18 %) por segundo año consecutivo por las dudas sobre su futura relación con los países de la Unión Europea. Los Países Bajos (cuarto mercado europeo) también tuvieron un descenso (-28%). Sin embargo, los resultados de los otros dos mercados principales, Alemania (19%) y Francia (+19%), así como otros grandes mercados como Suecia (+44%), Italia (+41%) e Irlanda (+84%), superaron las caídas y empujaron la inversión en 2019 por encima de la cifra de 2018.
Alemania representó 12.000 millones de euros de este aumento. Fue un récord para el país, que superó por primera vez la cifra de 2007. Berlín y Múnich registraron una inversión de más de 10.000 millones de euros en 2019. También fue un año histórico para Francia, con una inversión de más de 40.000 millones de euros impulsada por todas las categorías de activos y regiones.
Las oficinas siguen siendo la categoría de activos más importante a nivel europeo, representando el 47 % de la inversión (+6 %). Una veintena de operaciones representaron más de 20.000 millones de euros. En concreto, tres carteras de gran tamaño cambiaron de manos en Francia y Alemania, así como muchos edificios en estos dos países, pero también en el Reino Unido e Irlanda.
Los locales comerciales, por su parte, sufrieron una pérdida de confianza de los inversores, continuando un descenso que comenzó en 2016 y que parece de larga duración. Hubo varias carteras entre las mayores operaciones del año, encabezadas por dos carteras alemanas que representaron más de 1.000 millones de euros. Después de un crecimiento acelerado en 2017, el sector de la logística parece haber alcanzado una velocidad de crucero, atrayendo desde entonces inversiones por unos 38.000 millones de euros al año. En 2019 se realizaron 17 transacciones por más de 200 millones de euros, de las cuales 14 fueron carteras, principalmente en Francia, Suecia, Alemania y el Reino Unido.
La inversión extranjera en Europa se aceleró en 2019, creciendo un 10 % en comparación con 2018. La entrada de extranjeros representó la mitad de la inversión durante el año, es decir, 141.000 millones de euros. La inversión europea (13 %) estableció un nuevo récord (61.700 millones de euros), lo que representa el 44 % del total. Los países que más se beneficiaron de este aumento fueron Alemania (14.000 millones de euros), los Países Bajos (6.000 millones de euros) e Italia (4.000 millones de euros).
"Los inversores coreanos desempeñaron un papel importante en el mercado europeo en 2019. Por ejemplo, en Francia invirtieron 4.300 millones de euros, una cifra sin precedentes. A pesar de la fuerte implicación de los coreanos, las inversiones asiáticas en su conjunto han disminuido sustancialmente respecto a 2018 a nivel europeo, debido principalmente al Reino Unido. De hecho, las inversiones asiáticas en 2017 y 2018 fueron substancialmente superiores, principalmente dirigidas a activos de prestigio en Londres. En 2019 fueron menos activas (-50 % frente a 2018), lo que provocó un déficit de más de 6.000 millones de euros. Pero también invirtieron menos en Alemania (-30 %)", indica Larry Young, director del grupo de inversión internacional de BNP Paribas Real Estate.
Después de haber caído drásticamente en 2016, la inversión de los EE.UU. en Europa ha ido recuperándose paulatinamente. Tomó impulso en 2019 (+38 %), cuando logró la segunda cifra más alta desde 2015, que fue de 43.500 millones de euros. Los estadounidenses fueron en contra de la tendencia general, duplicando con creces su inversión en el Reino Unido y casi multiplicándola por dos en Alemania.
La inversión en Oriente Medio, por su parte, aumentó ligeramente en comparación con 2018 (+14%). Se ha mantenido en un rango de 6.500 a 8.000 millones de euros desde 2016. En 2019, los players de Oriente Medio aumentaron sus inversiones en Alemania e Italia, y se mantuvieron estables en el Reino Unido.