Con este establecimiento la enseña presenta un nuevo concepto de local en el que, dentro de una clínica veterinaria está incluido un espacio donde comprar productos para mascotas, como si de una pequeña tienda dentro de una clínica se tratara.
En el punto de venta, los visitantes también pueden disfrutar del asesoramiento del personal y hacer uso de los servicios de peluquería, ozonoterapia y click & collect (para recogida de productos comprados en la web).
En su establecimiento de Lérida, como parte de su filosofía tanto en la tienda online como las físicas, no se incluyen venta de mascotas ni de productos que puedan causar daño a los animales.