Será la primera vez que la marca exporta su casual dining fuera de Europa. De esta forma, el nuevo restaurante tiene el objetivo de convertirse en el flagship de la empresa en América, el primero de los cinco locales previstos en la ciudad mexicana para los próximos 18 meses.
El primer restaurante de la cadena de restauración asiática en la capital azteca estará situado en uno de los puntos más concurridos de la ciudad, el centro comercial Plaza Carso. El local cuenta con una superficie de 388 metros cuadrados, tendrá una capacidad para casi 200 comensales y estará rodeado de boutiques de moda.
“La llegada a México significa el inicio de un ambicioso plan de desarrollo por todo el continente americano, del cual México será una parte fundamental. Además, siguiendo en esta línea, ya se está trabajando en otros mercados con el mismo planteamiento basado en la calidad en todas sus variables”, ha explicado Jordi Quilez, director de desarrollo de la cadena.
El desembarco en América llega de la mano del Grupo Mandarin House, operador de restauración que cuenta con más de 30 restaurantes de diferentes conceptos en todo el país. El grupo tiene previsto abrir más restaurantes en la ciudad de la mano de este nuevo franquiciado, además de explorar nuevas localizaciones.
La enseña ofrecerá una serie de novedades, entre las que destacan la inclusión de algunos productos locales en la carta y una decoración y ambientación única.