La cadena de hipermercados prevé que esta compra permitirá la generación de 750.000 puestos de trabajo en el país americano.
La compañía ha concretado que, para llevar a cabo la operación, se dividirán seis categorías de productos principales: plásticos, textiles, pequeños electrodomésticos, comida procesada, bienes médicos y farmacéuticos, así como artículos no destinados a ventas.
John Furner, presidente y consejero delegado de Walmart, ha asegurado que esta iniciativa también implicará una reducción de emisiones de CO2 de cerca de 100 millones de toneladas métricas, debido a la compra de productos de cercanía.