Según un análisis de Bain & Company, los comercios minoristas "nativos digitales", es decir, los nuevos comercios minoristas que inicialmente operaban exclusivamente en línea duplicarán con creces su cuota de ingresos en el sector de aquí a 2030 y triplicarán su cuota de beneficios. Sin embargo, según el informe de Bain & Company The Future of Retail: The Age of Convergence, el foco estará puesto en la rentabilidad, la escala y las nuevas fuentes de ingresos, que están llamadas a impulsar una convergencia cada vez mayor entre los antiguos y los nuevos operadores minoristas.
Las empresas que forman parte del mercado minorista, como Amazon, y otros retailers online se han consolidado considerablemente en la última década, acaparando alrededor del 60% del crecimiento mundial del comercio minorista entre 2013 y 2021, según Bain & Company. El informe concluye que esta tendencia continuará y que los comercios minoristas nativos digitales duplicarán con creces su cuota de ingresos, pasando del 15% al 35% en 2030, mientras que los comercios minoristas menos rentables fracasarán y desaparecerán del terreno de juego.
Sin embargo, Bain & Company estima que la fase de mayor crecimiento de los comercios minoristas que apuestan por lo digital podría haber llegado a su fin, ya que los inversores esperan, como mínimo, obtener beneficios básicos de estas empresas y la financiación disponible anteriormente se está agotando. Los comercios minoristas tradicionales, por su parte, representarán una competencia cada vez más dura dado que siguen invirtiendo en plataformas y recursos digitales, revela el informe.
André Carvalho, socio en Bain & Company en la oficina de Madrid, señala: “En España, la penetración del comercio digital sigue creciendo a un ritmo acelerado, pero las dinámicas son distintas dependiendo de la categoría. Hay un fenómeno común a todas – la presión sobre los márgenes seguirá estando presente, especialmente en la categoría de distribución alimentaria. Los grandes grupos de distribución necesitan mejorar el perfil de rentabilidad de sus negocios online y pensar en nuevos modelos de generación de valor, apalancando sus activos actuales”.
El estudio de Bain & Company indica que la competencia por lograr una mayor presencia omnicanal está impulsando una convergencia tanto de talento como de estrategias entre los comercios minoristas tradicionales y los competidores digitales. Para 2030, Bain & Company calcula que la mitad de los beneficios del comercio minorista procederán de nuevas fuentes de ingresos “más allá del comercio”, como la actividad de terceros en el mercado, la monetización de datos, incluida la publicidad digital, los servicios de empresa a empresa y los servicios financieros para el consumidor. Por el contrario, las actividades tradicionales del comercio minorista, como la venta de bienes, probablemente no logren un aumento de los beneficios significativo en los próximos años.
Como resultado, los comercios minoristas están aumentando su inversión en el sector digital, al igual que están tratando de adquirir tiendas físicas. La búsqueda de financiación para llevar a cabo estas transformaciones impulsará una nueva oleada de operaciones, ya que los minoristas buscarán aumentar de escala rápidamente.
Marc-André Kamel, socio de Bain & Company y líder de la práctica global de Retail de la firma, comenta: “Antes de la pandemia, el interés se centraba en los retailers nativos digitales. En un contexto de sobrecapacidad de las tiendas, muchos comercios minoristas tradicionales luchaban por adaptarse a la irrupción del comercio electrónico, los descuentos y la innovación. Por otro lado, los integrantes del sector, como Amazon, intentaban aumentar su cuota de mercado, en parte gracias a los beneficios generados por sus actividades no relacionadas con la venta al por menor”.
“Sin embargo, ya hay indicios de que los minoristas tradicionales y digitales están adoptando una estrategia similar. El flujo de talento bidireccional entre algunos de los más jóvenes y los más veteranos del sector es una clara señal de la convergencia que será una de las características más destacadas del comercio minorista en la próxima década”, indica.
El informe de Bain & Company traza cuatro estrategias clave para que las empresas minoristas garanticen el éxito en esta nueva era de convergencia del sector:
Despertar la euforia del cliente. Los clientes, y no el canal, determinarán cada vez más las decisiones. Asimismo, los minoristas están creando un ecosistema integral centrado en el conocimiento exhaustivo de sus clientes.
Sobresalir en la omnicanalidad 3.0. Los minoristas tendrán que invertir con precaución y hacer concesiones para destacar frente a sus competidores. Esto significa enfrentarse a la proliferación de “canales” y estar preparados para la próxima revolución tecnológica, como la web3, el blockchain y el metaverso.
Crecer más allá del comercio. Teniendo en cuenta que es poco probable que aumente el volumen de beneficios de las actividades minoristas tradicionales, los minoristas tendrán que encontrar nuevas fuentes de creación de valor.
Captar talento. Los líderes de la innovación tecnológica seguirán teniendo una ventaja significativa a la hora de atraer a los mejores talentos. Los minoristas deben participar en una complicada partida de “Tetris del talento” para ser la mejor opción como empleador en un entorno laboral difícil.