El local comercial se ha consolidado como un activo estratégico para los inversores en Barcelona durante el primer semestre de 2025, según el último informe de mercado de Forcadell. La actividad tanto en alquiler como en inversión ha continuado creciendo en este periodo, en línea con la recuperación registrada desde la segunda mitad de 2024, y está marcada por una demanda más especializada, una mayor diversificación territorial y un reposicionamiento activo del retail dentro del tejido urbano.
La oferta de locales ha aumentado un 4,2% respecto al año anterior, aunque el comportamiento varía según las zonas. En arterias principales como Passeig de Gràcia y Portal de l’Àngel, la disponibilidad se sitúa por debajo del 3%, con apenas rotación. En cambio, en áreas como Sant Andreu o Sants-Montjuïc, la disponibilidad alcanza el 12%, aunque muchos de estos espacios requieren adecuaciones importantes para adaptarse a las nuevas necesidades comerciales.
El informe señala que los inversores están priorizando activos ocupados por inquilinos solventes con contratos de larga duración, en busca de estabilidad de ingresos. Al mismo tiempo, se observa un aumento del interés por locales con necesidad de reforma o reposicionamiento, especialmente en ubicaciones secundarias o en ciudades de tamaño medio. Esta estrategia apunta a generar valor mediante intervenciones sobre el activo, más allá de las zonas prime.
“Los inversores están siendo más selectivos, pero también más proactivos. Ya no buscan solo ubicaciones prime, sino activos con potencial para generar valor a través de su reposicionamiento”, explica Jordi Fandos, director del departamento de Retail de Forcadell. “Eso explica el creciente interés por locales fuera de los ejes tradicionales”.
En cuanto a la demanda, el 56% de las operaciones se han concentrado en el sector de la restauración con valor añadido, seguida por la alimentación, con un 16%, y la moda y complementos, con un 15%. El crecimiento del comercio electrónico, el quick commerce y las entregas ultrarrápidas también ha impulsado nuevos usos para los locales físicos, como microalmacenes urbanos o espacios logísticos de última milla, ampliando su papel dentro de la cadena de valor del retail.
Respecto a las rentas, los ejes más consolidados han superado los niveles previos a la pandemia. Passeig de Gràcia se mantiene como referencia para las marcas de lujo, mientras que Portal de l’Àngel continúa siendo uno de los puntos con mayor tráfico peatonal de Europa y foco de interés para el gran consumo. La elevada presión de la demanda y la escasa disponibilidad consolidan ambos enclaves como zonas de alta competitividad comercial.