Grupo Lar cierra el año alcanzando los 590.000 metros cuadrados certificados con BREEAM. Tanto el 100% de cartera de retail como el 100% de la de residencial en alquiler, cuentan con este sello. Además, la estrategia de la cartera de logística es certificar en BREEAM Excelente a todos sus activos. Dos de ellos, el activo en Quart de Poblet (Valencia), de 23.933 metros cuadrados y el de Esparraguera (Barcelona) de 22.152 metros cuadrados, ya han obtenido una de las calificaciones más altas posibles.
En el caso de la cartera de retail, propiedad de Lar España, con más de 500.000 m2 certificados y el 100% de la cartera acreditada, cuenta con un 98% de los activos en términos de GAV cuentan con calificación “Excelente” o “Muy Bueno”.
La totalidad de la cartera gestionada por Vivia está certificada en BREEAM fase de construcción, superando los 45.000 metros cuadrados certificados y planea certificar en BREEAM las futuras promociones. La cartera cuenta con “Bueno” en la mayoría de sus promociones y Residencial Corus, en Madrid, que es el primer proyecto en España de viviendas en alquiler con certificación Passive Hosue, tiene “Muy Bueno” en certificación BREEAM. Asegurará a los residentes una reducción del consumo energético de entorno al 70% respecto a un inmueble tradicional.
“Seguimos apostando por la sostenibilidad y trabajando para que todos nuestros activos, tanto a nivel nacional como internacional cumplan con altos estándares en áreas como la eficiencia energética, gestión del agua, gestión de residuos y selección de materiales sostenibles. Consideramos fundamental incluir criterios y objetivos medioambientales dentro de la gestión de nuestros activos que repercuten directamente en beneficios de ahorro y mejoras en los estándares de salud para todos los agentes vinculados en el día a día de nuestros activos”, afirma Maribel Plaza, CFO corporativo de Grupo LAR.
BREEAM establece estándares rigurosos para la evaluación del rendimiento ambiental de los edificios. La certificación demuestra que un activo cumple con altos estándares en áreas como la eficiencia energética, gestión del agua, gestión de residuos y selección de materiales sostenibles. Además, la certificación BREEAM impulsa prácticas de construcción y gestión más eficientes desde el punto de vista energético y ambiental, lo que puede conducir a la reducción de costos operativos a lo largo del ciclo de vida del edificio.
Adicionalmente, esta certificación mejora la funcionalidad, flexibilidad y durabilidad de los edificios, siendo uno de los estándares que garantiza un ambiente interno óptimo (calidad del aire, adaptación al cambio climático, niveles de ruido o de iluminación, entre otros) y una mejora en los resultados de explotación.