A lo largo de sus más de dos décadas de trayectoria en el sector de la restauración organizada, Restalia ha desarrollado diferentes formatos de establecimientos, adaptándose en cada caso a la realidad del entorno en el que se enmarca su oferta gastronómica. Si hay algo que define a Restalia es, precisamente, la flexibilidad, tanto por las cinco marcas que actualmente tiene en su cartera, todas de creación propia, como su adaptabilidad al entorno y al potencial franquiciado.
Dicho esto, los centros comerciales siguen jugando un papel clave en el ocio, también gastronómico, de nuestro país, y las marcas de restauración son, indudablemente, un reclamo para ello.
Si bien en Restalia la vida de barrio es un entorno en el que nos sentimos cómodos, esa flexibilidad que comentaba nos permite también convertirnos en un elemento clave para los centros comerciales, en los que los visitantes invierten muchos minutos disfrutando de su tiempo libre, buscando la oferta más completa en un solo lugar. Nuestro compromiso como la mayor multinacional española de restauración organizada radica en aportar la mejor propuesta siendo fieles a nuestra esencia, que es ofrecer la mejor calidad al mejor precio.
Del mismo modo, vemos cómo la experiencia en los locales se torna cada vez más importante: el servicio, la decoración, el ambiente… todo es clave para que el consumidor exprima su tiempo con nosotros y quiera volver, más en un entorno tan competitivo como el actual.