Una gran parte de los recursos que se derivan de la gestión del textil usado depositado en los contenedores instalados en Caprabo se destina a un proyecto de huertos sociales. En 2019, fruto de la colaboración entre Humana y Caprabo, la gestión que la entidad hace de la ropa ha permitido destinar 3.856,53 euros al proyecto Hort al terrat, del Ayuntamiento de Barcelona, en el que participan 120 personas con discapacidad. La iniciativa se desarrolla desde el Instituto Municipal de Personas con Discapacidad, que desde hace tres años está presente en cinco edificios municipales de Barcelona.
El objetivo principal de este proyecto es recuperar los espacios en desuso de la administración y mejorar la calidad de vida de las personas con discapacidad. Reciben formación en horticultura para hacerse cargo de los huertos urbanos. Los alimentos que se recogen se reparten entre comedores sociales y bancos de alimentos. Este proyecto ganó el año pasado el premio European Public Sector Awards (EPSA) en la categoría de administraciones locales y supralocales.
Según un estudio realizado por profesionales de la Universidad Autónoma de Barcelona, del Instituto de Ciencia y Tecnología Ambientales, del Barcelona Laboratory for Urban Environmental Justice and Sustainability, del Instituto Hospital del Mar de Investigaciones Médicas y de ISGlobal, la participación en el proyecto aumenta el índice de calidad de vida de las personas con discapacidad, así como su rol social, más activo e implicado con el entorno.
Caprabo y Humana trabajan conjuntamente desde hace casi dos décadas en la recogida de ropa usada en sus supermercados. Además, Humana también colabora en las actividades que Caprabo organiza en el marco de la Semana Europea de Prevención de Residuos.