“Desde Restalia queremos abanderar la recuperación de la restauración organizada gracias a nuestra operativa de contacto 0 y a través de medidas que permitan tanto a los empleados como a los consumidores disfrutar de nuestras marcas con total seguridad”, declara Belén Martín, directora general de Restalia.
El grupo se encuentra inmerso en la implementación de una serie de medidas que van desde la utilización de termómetros, geles hidroalcohólicos, guantes, mascarillas y pantallas por parte de empleados y clientes, hasta la implantación de sistemas de limpieza y desinfección de materiales, superficie y aire, mamparas protectoras, así como vinilados y cintas de marcado para asegurar la distancia de seguridad.
Habrá zonas reservadas para el take away, así como para la entrega de pedidos de los proveedores. Se retirarán los llamadores, todo se hará por megafonía, y se eliminarán los servilleteros y cartas de mesa, así como los dispensadores de salsas o bebidas, ya que todo saldrá de cocina.
Estas medidas se unen a las ya anunciadas inmediatamente después del inicio del estado de alarma decretado en territorio nacional, y la creación de Departamento de Soporte y Apoyo Restalia (S.A.R), liderado directa y personalmente por Belén Martín. Su objetivo ha sido atender e informar de las medidas a adoptar en cada momento, así como asesorar a los franquiciados acerca de diversos asuntos como la gestión del personal, cierre de establecimiento decretado por las autoridades, moratorias de alquileres, ayudas públicas, etc.
El modelo de negocio de la compañía se caracteriza por una operativa contacto 0, donde no hay servicio de mesa y, por lo tanto, el contacto es reducido. La mayoría de los productos se consumen sin necesidad de cubiertos, y cuando son necesarios, éstos son desechables. Los clientes se llaman a través de megafonía, muchos productos no se manipulan en los locales porque están preparados de origen eliminando así cualquier tipo de patógeno. Además, los productos son de consumo rápido, hay una alta rotación de mesas, con lo que se evitan las colas en los locales y hay zonas individualizadas de entrega de producto sin contacto.
“En Restalia estamos trabajando de manera incesante para brindar todo el apoyo que nuestros franquiciados necesitan, aliviándoles ante la incertidumbre causada por el coronavirus y ayudándoles para retomar la normalidad en cuanto sea posible”, afirma Belén Martín.
Restalia mira al futuro con optimismo y con la estrategia decidida de seguir abriendo locales en España. “Desde Restalia apoyaremos tanto a franquiciados como al consumidor final ante cualquier recesión económica ocasionada por el COVID-19. La restauración organizada es uno de los principales motores económicos de nuestro país y en nuestro caso, gracias a conceptos de Restalia, nuestros locales pueden afrontar esta etapa en la que está inmersa el país”, expresa Belén Martín.
“La fortaleza de nuestras marcas, tras 20 años, debido a la cohesión y consistencia de nuestras políticas y de nuestros mensajes de cara a nuestros consumidores, hacen que nuestras marcas hayan aguantado esta fuerte crisis, tal y como nos indican nuestros informes internos. Nuestras enseñas siempre han sido un refugio para los clientes, incluso en los momentos más complicados”, añade.