¿Cómo valoran las nuevas normativas autonómicas y municipales en Madrid que flexibilizan los cambios de usos?
Francisco Hernanz Emperador: La sociedad afronta importantes desafíos, génesis de compromisos como la Agenda 2030 y los ODS. Dar respuesta a los mismos requiere de objetivos en diferentes niveles: sociales, económicos y medioambientales. Avances tecnológicos, digitalización, amenazas del cambio climático, diversidad cultural que conlleva revisar patrones de conducta, cambios acelerados en las formas de vida, etc. son diferentes variables que requieren de la adaptación de nuestras ciudades aportando soluciones en todos sus ámbitos.
¿Cómo valoran ampliar el ámbito de actuación de las entidades urbanísticas colaboradoras?
F.H.E: Las entidades urbanísticas colaboradoras (ECUs) de verificación, inspección y control, colaboran en la tramitación de licencias y declaraciones responsables de cualquier uso o actividad con cualquier tipo de obras. Son entidades privadas debidamente acreditadas que contribuyen al cumplimiento normativo en el ámbito urbanístico municipal, a la dinamización y agilidad del mismo.
¿Qué es necesario actualizar en el Código de la Edificación para que siga suponiendo la revolución en materia de calidad y sostenibilidad en la construcción que ha sido desde sus inicios?
F.H.E: El Código Técnico de la Edificación (CTE) es un elemento vivo, en continua adaptación. En estos momentos se está dando forma a un documento dedicado a la sostenibilidad, cuya publicación está prevista para 2026. Asimismo, recientemente se ha aprobado un nuevo Reglamento de Productos de Construcción que introduce criterios para evaluar el impacto ambiental de los productos a lo largo de su ciclo de vida, si bien este Reglamento, que tendrá influencia en el CTE, deja abiertos preceptos a la propia decisión de los estados miembros que deberán regularse. Es decir, la sostenibilidad entra de par en par en la reglamentación técnica de nuestro sector, al tiempo que la economía circular, sumándose a la eficiencia energética y al uso de energías renovables.
“Nos hallamos ante un reto mayúsculo,
al que será difícil dar respuesta con los
procesos y las herramientas a los que
estamos acostumbrados”
¿Cuáles son los ámbitos en los que más falta por avanzar en materia de sostenibilidad en la edificación?
F.H.E: Es importante subrayar que la falta de respeto medioambiental tendrá consecuencias. La Unión Europea (UE) ha desarrollado un marco, denominado Level(s), que incluye un conjunto de indicadores y parámetros comunes para medir el comportamiento de los edificios en términos de sostenibilidad. Este marco y la llamada Taxonomía verde europea van a ser determinantes para la financiación del sector inmobiliario. Esta Taxonomía es un sistema que permite a los inversores determinar qué proyectos afectan negativamente al clima y al medio ambiente y, en consecuencia, retirar sus inversiones. Los proyectos edificatorios que no se alineen con la Taxonomía verde lo tendrán ciertamente complicado. Es decir, se dificulta escapar a la actual atmósfera de sostenibilidad medioambiental que permea en todos los ámbitos de nuestra vida.
¿Cómo se están adaptando a las nuevas exigencias provenientes de Europa?
F.H.E: Diferentes cambios normativos y planes nacionales van a suponer una revolución en el sector de la edificación. El ambicioso objetivo que se ha trazado la Unión Europea para alcanzar en el año 2050, la descarbonización total de la actividad constructora, parece lejano en el tiempo, pero en términos legislativos y de consenso en el sector, disponemos de menos de 20 años para implementar los elementos suficientes que garanticen una hoja de ruta a un ritmo bastante superior al actual. Algunos de los cambios normativos mencionados en favor de la salud edificatoria y la sostenibilidad no solo afectan a los edificios de nueva planta, sino también a los ya existentes. Un aspecto que añade más complejidad aún al difícil panorama que atravesamos.
¿Perciben que los usuarios están verdaderamente concienciados con la sostenibilidad de las edificaciones en las que viven, trabajan, se divierten...?
F.H.E: La necesaria trasposición de la reciente Directiva (UE) 2024/1275, que fomenta la mejora de la eficiencia energética de los edificios y la reducción de sus emisiones de gases de efecto invernadero, con el fin de lograr un parque inmobiliario de cero emisiones a más tardar en 2050, generará un cambio de mentalidad disruptivo en el sector, afectando a gran velocidad a la profesión. Nos hallamos ante un reto mayúsculo, al que será difícil dar respuesta con los procesos y las herramientas a los que estamos acostumbrados.
¿Cuáles son las principales innovaciones que esperan en los edificios de cara a 2030 y 2050?
F.H.E: De entrada, hay cierta incertidumbre, ya que la Comisión europea calcula que deberá editar 27 documentos y guías para dar forma a la Directiva antes mencionada. Respecto a su trasposición, habrá una modificación del CTE en 2026 y otra en 2028. Los focos de la trasposición serán las siguientes líneas principales: renovación, descarbonización, digitalización y edificios inteligentes; certificado de eficiencia energética con mayor rigor como soporte vital de la toma de decisiones, apoyada por el pasaporte de renovación de edificios; un Plan nacional de renovación de edificios con hitos a cumplir; edificios de cero emisiones; potencial de calentamiento global basado en criterios Level(s) y en las DAPs (declaraciones ambientales de producto); etc. La directiva exige a los estados miembros que se pongan a disposición del público registros actualizados de expertos cualificados. Parece conveniente aprovechar el momento e impulsar la certificación de personas regulada por la norma internacional UNE EN -ISO/IEC 17024, basada en competencias, llevada a cabo por entidades acreditadas a tal fin por ENAC como garantía de mercado de calidad de los técnicos intervinientes.