Este ajuste se ha debido principalmente a las restricciones impuestas por la COVID-19, que han obligado al cierre de muchos de sus centros. Los ingresos brutos por rentas generados por los centros comerciales ascendieron a 262,5 millones de euros en los tres primeros meses del año frente a los 291,9 registrado en el mismo periodo del año pasado.
Casi todos los países europeos en los que opera Klépierre ordenaron el cierre de actividades minoristas durante un período medio de 1,5 meses. "Hemos revisado nuestra guía de flujo de efectivo actual neto para 2021 a 1,80 euros por acción. Además, proponemos una distribución de 1,00 euros por acción en efectivo, lo que demuestra nuestra confianza en la recuperación de nuestro negocio ”, ha explicado Jean-Marc Jestin, chairman de Klépierre Executive Board.
El 55% de los centros de la compañía ya han reabierto (Dinamarca, Portugal, Noruega, Países Bajos, Polonia, España, Suecia e Italia). Además, el grupo prevé que este porcentaje ascienda al 95% a finales de mayo.
"Estamos entusiasmados y confiamos en la reanudación rápida de nuestro negocio. Ya estamos observando señales alentadoras de recuperación, lo que demuestra que nuestros centros comerciales continúan atrayendo tanto a compradores como a minoristas en expansión", ha valorado Jestin.
El 35% de los ingresos de Klépierre procede de Francia y Bélgica. Ambos países fueron de los mercados que menos redujeron su facturación en el primer trimestre. En este sentido, la empresa contrajo sus ingresos por rentas un 9%, hasta los 98,8 millones de euros.
Este ajuste fue del 17,5% en el mercado de la Península Ibérica, donde los ingresos de la compañía alcanzaron los 28 millones. En el caso de España, donde el grupo opera en los centros comerciales Nueva Condomina, Plenilunio, La Gavia, Príncipe Pío, y Maremagnum, se registraron 25,2 millones de euros en ingresos, un 14% interanual menos.